La visita Castillo de Dunnottar es una experiencia inolvidable. Es un castillo medieval, hoy en ruinas, pero todavía ofrece unas vistas impresionantes. Se encuentra asentado sobre un precipicio rocoso en un cabo en la costa nordeste de Escocia.
A pesar de su mal estado de conservación, aun se pueden apreciar las ruinas de los cuarteles, alojamientos, almacenes, establos, capilla y salón. El castillo fue el hogar de los Earls Marischal, una de las familias más poderosas de la tierra.
El castillo fue agraciado a lo largo de la historia con la presencia de William Wallace, Mary Queen of Scots, el marqués de Montrose y el futuro rey Charles II. Aunque la presencia más famosa fue la de una pequeña guarnición que se mantuvo contra el poder del ejército de Cromwell durante ocho meses y que guardan las joyas de la corona escocesa. La Corona, cetro y la espada ahora ocupan un lugar en el Castillo de Edimburgo.
Un oscuro capítulo en la historia de Dunnottar es el de la "whig Vault. La truculenta historia de la prisión en 1685 de un grupo de Gobernantes que se negó a reconocer la supremacía del Rey en asuntos espirituales.
El castillo de Dunnottar jugó un papel importante en la Historia de Escocia durante la Edad Media y hasta la Ilustración, debido a su posición estratégica que controla las rutas de transporte marítimo hacia el norte de Escocia
Las rocas y los entrantes y salientes de la costa existentes al norte y al sur del castillo han sido convertidas en residencia de decenas de miles de aves marinas, lo que convierte a esta extensión de la costa escocesa en un notable santuario de las aves en el norte de Europa.
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