Este castillo está situado en Dunvengan en la isla de Skye, frente a la costa occidental de Escocia. Además posee una serie de importantes reliquias en el que se incluye el Fairie Bandera de Dunvegan y la Copa de Dunvegan.
Arqueológicamente hablando este castillo es una enorme estructura que se construyo en muchos años y que a lo largo de su historia ha vivido dramas, batallas y momentos felices. En sus amplios salones hay muchas reliquias y la mayoría pertenecen a los jefes del Clan MacLeod y datan de los tiempos medievales, pero si el castillo es magnífico en si mismo los cierto es que sus alrededores le otorgan el marco perfecto para resaltar su importancia: rocas, montañas, cielo, una pequeña isla hundida en el mar y en los jardines unas cataratas rodeadas de hermosa vegetación.
Es una construcción defensiva compuesta por seis edificios separados de los cuales pueden visitarse cinco ya que el sexto es la casa y oficinas del actual jefe del Clan MacLeod. Esta construido en una meseta de basalto sobre el lago Duvengan y tiene una apariencia de fuerte inexpugnable y así se lo hizo saber siempre a los enemigos del clan. Pasados los tiempos medievales sufrió una gran trasformación en el siglo XIX, entre los años 1840 y 1850, cuando se le dio cierto tono “romántico”. Sin embargo, puertas adentro se conservaron los mismos edificios, cada uno con un estilo diferente.
Lo cierto es que cada generación del clan lo ha adaptado a las necesidades de su propia época y es por eso que este es uno de los castillos más apreciados de Escocia.
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